El velero Aglaia cuenta con la vela pintada a mano más grande del mundo. Esta vela ha sido creada por Furuholmen. Este es un claro ejemplo que nos demuestra que el arte no tiene fronteras y que no es necesario verlo únicamente colgado en una pared (aunque también es una buena forma). En ese caso la podremos ver desplazarse por el agua con un estilo único.
La vela principal de la embarcación cuenta con una altura de 77 metros, equivalente a un edificio de 25 plantas, en total, la superficie alcanza los 1780 metros cuadrados, una vela realmente grande e impactante, más aun cuando se ve en ella una obra de arte.
Su talentoso creador no quiso presentar ningún boceto, la empresa tuvo que confiar en él, y lo bien que hicieron, porque realmente el resultado es magnifico. Anteriormente habían invitado a este artista de Noruega a decorar el interior de otro barco.
Furuholmen ha logrado aprovechar la translucidez de la lona para que las imágenes pueden ser vistas con el sol detrás. Para ello trabajó un buen tiempo analizando la tonalidad de colores y verificando la translucidez de la tela, además de la posición correcta.
En su confección trabajaron un total de 10 personas durante un mes. El estreno oficial tuvo lugar en Mónaco, durante el gran Premio de la Fórmula 1. Desde ese momento podremos verla y disfrutarla en diferentes mares del mundo. Una oportunidad ideal para estar en contacto con una excelente y original pieza de arte.